Permeabilidad al oxígeno de las lentes de contacto: el secreto de la respiración ocular
Permeabilidad al oxígeno de las lentes de contacto: el secreto de la respiración ocular
Una vez que te pones las lentes de contacto, la felicidad se vuelve tan simple que nadie puede resistirse al encanto de las lentes de contacto. Sin embargo, los ojos también necesitan respirar. La permeabilidad al oxígeno de las lentes de contacto es la clave para la respiración corneal y la salud ocular. ¿Por qué los ojos necesitan respirar? La superficie del globo ocular hya que no tiene vasos sanguíneos, y depende en gran medida de las lágrimas para absorber y transportar oxígeno del aire para apoyar las funciones celulares. Si la córnea no recibe suficiente oxígeno, puede funcionar mal en cualquier momento. Si esta falta de oxígeno persiste y empeora, se producirá sequedad, enrojecimiento y sensación de cuerpo extraño. En casos más graves, puede provocar inflamación o el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos, lo que en última instancia afecta la visión.
La permeabilidad al oxígeno de las lentes de contacto afecta directamente a la capacidad de la córnea para respirar libremente. Para garantizar que la córnea pueda respirar libremente, las lentes no deben obstruir este proceso. Cuanto mayor sea el coeficiente de permeabilidad al oxígeno de las lentes de contacto, mejor será su permeabilidad al oxígeno, lo que significa que más oxígeno puede llegar al globo ocular a través de las lentes. Actualmente, las lentes desechables diarias generalmente tienen un mayor contenido de agua y un valor DK más alto, lo que las convierte en una opción de alta calidad. Si las lentes están hechas de hidrogel de silicona, son aún mejores, ya que pueden suministrar continuamente suficiente oxígeno a los ojos incluso con un uso prolongado. Por lo tanto, elegir la lente adecuada es como darle a tus ojos una capa adicional de protección.
Sin embargo, muchas personas, por comodidad, usan sus lentes de contacto todo el día y no quieren quitárselas ni siquiera por la noche. Esto conduce a ojos cada vez más secos y visión borrosa. Cuando la humedad de las lentes de contacto se evapora, absorben las lágrimas en exceso, lo que provoca una grave falta de humedad en el ojo. Con el tiempo, esto puede debilitar la resistencia del ojo, permitiendo que las bacterias invadan, y la inflamación puede seguir rápidamente. En resumen, el cuidado adecuado es esencial en el día a día. Es importante cumplir estrictamente con la duración de uso recomendada y nunca dejar las lentes durante la noche. Las lentes caducadas deben desecharse inmediatamente; De lo contrario, incluso las mejores y más caras lentes de contacto solo causarán más daño. Además, es importante darle un descanso a tus ojos para asegurarte de que no estén sobrecargados cuando los necesites.